Los embalses de la Sierra
de Madrid desempeñan una labor fundamental. A su innegable valor
medioambiental se suma la importancia que tienen para el abastecimiento de la
población. Incluso en algunos de ellos están permitidas las actividades
acuáticas. Mucho se está hablando estos días del Lago Ness y del 81 aniversario de la búsqueda de su
famoso monstruo, Nessie, a la que ahora se han sumado cámaras
subacuáticas.
Sin embargo, no hay que irse hasta Escocia para encontrar fenómenos paranormales. En los embalses de la Sierra de Madrid, mucho más cerca, también se han registrado sucesos extraños, dignos de las mejores historias de misterio y ciencia ficción.
Estos acontecimientos tuvieron su máxima repercusión entre los años 60 y 80 del pasado siglo XX y generaron gran revuelo en la opinión pública. En el conocido como embalse de El Vellón, oficialmente llamado embalse de Pedrezuela, se buscó concienzudamente una base alienígena submarina.
El operativo se inició después de que un individuo, que decía ser extraterrestre, afirmara que la instalación se ocultaba bajo esas aguas. La búsqueda no dio resultados, pero quien formó parte de ella sí se sorprendió de las sensaciones que vivieron y de cómo se habían comportado los dispositivos que portaban.
No muy lejos de allí, uno de los embalses de la Sierra Norte de Madrid también fue protagonista de acontecimientos muy extraños. Se trata del emblemático embalse de El Atazar. Algunos habitantes de la población cercana de El Berrueco aseguraron haber visto figuras humanoides que medían más de tres metros, luces de colores que emergían, objetos que entraban y salían del agua, y vehículos silenciosos que sobrevolaban el embalse a muy baja altura.
Las declaraciones vecinales llamaron la atención de decenas de personas que acamparon en las inmediaciones del embalse, tanto en la orilla de El Berrueco como en la de Cervera de Buitrago. Su misión, observar, día y noche, todo lo que ocurría en el embalse. Sus testimonios de lo que vieron y sintieron fueron realmente sobrecogedores. Aun así, la incredulidad oficial y el paso del tiempo propiciaron que los avistamientos que aseguraban haber presenciado fueran cayendo en el olvido.
En cualquier caso, tanto si hay fenómenos extraterrestres como si no, lo que sí es una realidad incuestionable es que los embalses de la Sierra Norte de Madrid son espectaculares y dignos de visitar.
Sin embargo, no hay que irse hasta Escocia para encontrar fenómenos paranormales. En los embalses de la Sierra de Madrid, mucho más cerca, también se han registrado sucesos extraños, dignos de las mejores historias de misterio y ciencia ficción.
Estos acontecimientos tuvieron su máxima repercusión entre los años 60 y 80 del pasado siglo XX y generaron gran revuelo en la opinión pública. En el conocido como embalse de El Vellón, oficialmente llamado embalse de Pedrezuela, se buscó concienzudamente una base alienígena submarina.
El operativo se inició después de que un individuo, que decía ser extraterrestre, afirmara que la instalación se ocultaba bajo esas aguas. La búsqueda no dio resultados, pero quien formó parte de ella sí se sorprendió de las sensaciones que vivieron y de cómo se habían comportado los dispositivos que portaban.
No muy lejos de allí, uno de los embalses de la Sierra Norte de Madrid también fue protagonista de acontecimientos muy extraños. Se trata del emblemático embalse de El Atazar. Algunos habitantes de la población cercana de El Berrueco aseguraron haber visto figuras humanoides que medían más de tres metros, luces de colores que emergían, objetos que entraban y salían del agua, y vehículos silenciosos que sobrevolaban el embalse a muy baja altura.
Las declaraciones vecinales llamaron la atención de decenas de personas que acamparon en las inmediaciones del embalse, tanto en la orilla de El Berrueco como en la de Cervera de Buitrago. Su misión, observar, día y noche, todo lo que ocurría en el embalse. Sus testimonios de lo que vieron y sintieron fueron realmente sobrecogedores. Aun así, la incredulidad oficial y el paso del tiempo propiciaron que los avistamientos que aseguraban haber presenciado fueran cayendo en el olvido.
En cualquier caso, tanto si hay fenómenos extraterrestres como si no, lo que sí es una realidad incuestionable es que los embalses de la Sierra Norte de Madrid son espectaculares y dignos de visitar.
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